La institutriz, que en realidad se
llamaba Ana Milner Pink nació el día 13 de febrero de 1913 y
falleció el 22 de octubre de 1963, su padre era Alfred Milner un
pintor poco conocido que mantenía a su familia con muchos esfuerzos
y sin ayuda de nadie, trabajando de minero, por otro lado, su madre
era Cristine Pink una simple ama de casa.
Ana no fue al colegio, ya que durante
su juventud estuvo ayudando a su madre en tareas de la casa, aunque
ella siempre buscaba algún hueco en su día a día para salir a ver
el bosque y dar un paseo, su madre la enseñó a leer y a escribir,
también le apasionaba ver a su padre pintar. En su octavo cumpleaños
su padre le regaló un cuaderno para que pintara y así tuviera una
afición además relacionada con uno de los dos oficios de su padre.
Nunca tuvo relaciones de ningún tipo
con hombres, no le atraían, sin embargo, tenía amigas que
compartían la misma afición que ella, se llamaban Rose y Laura,
tenían 14 años, la misma edad que Ana. Las conoció en el bosque
cerca de un sauce gigante en una tarde de primavera, Ana siempre iba
allí para inspirarse, y lo conseguía, ese día las encontró
pintando el sauce en sus respectivos cuadernos, y tras estar un rato
sin hablar, Ana se lanzó y les dijo que lo hacían bastante bien y
si podía sentarse a su lado.
La afición por la pintura hizo que en
Ana despertara una curiosidad por la naturaleza y que se fijase en
todos los detalles que le rodeaban, también le ayudo a conseguir dos
nuevas amistades, esto forjó un vínculo muy especial entre ella y
la pintura.
Su primer trabajo, aparte de ayudar en
su casa, fue de repartidora de periódicos, cuando solo tenía 17
años, la madre de su amiga Rose y la directora de una imprenta las
contrató para que todas las mañanas repartieran periódicos por
todas las casas que había en su pueblo. Más tarde la contrataría
la señora Grose para que cuidara de los peques de la casa en Bly, la
mansión.
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